Diplomado UAH: Fernando Trueba. ¡Fernando Trueba!

El año pasado fue la primera experiencia del Diplomado de Cultura Audiovisual Contemporánea que dicta la Universidad Alberto Hurtado. Fue el primer paso, pero dio hartos golpes certeros: trajo a Chile a dos argentinos claves de la década (Lucrecia Martel y Quintín), visitas que vinieron en exclusiva a hacer clases a los inscritos. Este año el Diplomado se repite, y la verdad no lo recomendaría si no lo encontrara bueno (ojo con mi recomendación, que viene de cerca porque yo hago clases allí).

¿Para que sirve un Diplomado? No tengo idea. Este por lo menos sirve para expandir la cabeza cinéfila, para conocer un cine que no conocemos, y hablar de ese cine. Para ordenar la cabeza si acaso luego se quiere dar el paso de filmar algo propio. Supongo. O para echar a andar la cabeza adormecida de ideas, sobre todo si se trabaja en el mundo audiovisual. Ni idea. Solo sé que este año bajaron los aranceles, y viene supervitaminizado, porque además de doña Lucrecia y don Quintín, la gran estrella invitada es Fernando Trueba, un cineasta que siempre me ha parecido admirable: más allá de su megaéxito internacional llamado «Belle epoque», me parece un líder a seguir por las cosas que piensa y dice. Como cuando agradeció su Oscar a Mejor Película Extranjera a Billy Wilder, o como cuando en Chile, invitado a un noticiero nocturno, le paró los carros a una periodista seudo-agujona y bien tontorrona (que las hay por miles) quien, buscando cierta polémica artificial que no venía al caso, le preguntó a Trueba por sus «fracasos» en Hollywood que lo hicieron volver a España.

Periodista: ¿No le importa no haber tenido éxito en Hollywood?

Trueba: ¿Éxito? El éxito no tiene ninguna importancia. El éxito es la meta de los mediocres. Yo prefiero preocuparme de hacer películas, y tratar de que sean buenas películas. Es mucho más difícil hacer una buena película que tener éxito.

Ese es Trueba. Las clases comienzan el 10 de abril, así que queda poco.