Es de no creerlo: según La Tercera (citando a El País de Uruguay) el montevideano Juan Pablo Rebella, codirector de «25 watts» y «Whisky» (en la foto, a la derecha) se suicidó anoche en su casa en Montevideo. Describe los hechos en una corta nota el diario uruguayo:
Compañeros del codirector de Whisky y 25 Watts, confirmaron que se trató de un suicidio por lo que la Policía recibe desde esta mañana declaraciones de quienes encontraron el cuerpo.
Cerca de la Jefatura El País pudo ver a Pablo Stoll, con quien Rebella compartió la dirección de ambos films y con quien se encontraba escribiendo otro guión, con los ojos llenos de lágrimas.
El velatorio del cineasta, de 32 años, comenzará a las 14.00 horas en la empresa Martinelli, Barrios Amorim y Canelones.
Gracias a Nicolás Cuevas por avisar esta noticia. Atentos a la actualización de esta nota.
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Nota obituario en El Mundo de España.
Según Rolling Stone Argentina, «su cuerpo sin vida habría sido encontrado por su pareja, y también por su amigo y compañero de trabajo Stoll».
Folha Online (en portugués) repite el cable de ANSA.
El blog de Polaster decreta 72 horas de luto y recoge reacciones en Uruguay.
El testimonio de un blogger que lo conoció, llamado Xabier, aquí.
El siempre atento David Hudson recoge el guante informativo en el mundo angloparlante.
Via Technorati se pueden encontrar otros comentarios, sobre todo de blogueros uruguayos (repartidos en el mundo) y portugueses.
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ACTUALIZACION – 19:44 HRS. De acuerdo a la agencia AFP, recogido por Venevision, la causa de la muerte habría sido «una bala en la cabeza».
Rebella fue encontrado por su pareja y por su amigo y compañero de trabajo Pablo Stoll, «con un impacto de bala en el cráneo y firmes indicios de que se quitó la vida», precisaron fuentes de la Jefatura de Policía de Montevideo.
Tras practicársele la autopsia, el juez actuante Néstor Valetti confirmó a la AFP que la defunción «obedeció al impacto del proyectil en su cabeza», pero explicó que la investigación tendiente a esclarecer las circunstancias es por ahora reservada.
El sitio Observa recoge los conmocionados testimonios de los actores de las peliculas de Rebella y Stoll.
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Toda esta recolección de informaciones dispersas es casi un retrato de lo impactante que es esta noticia. Como si estuviera buscando que alguien nos diga algo más para entender lo inentendible. Personalmente, debido a mucho trabajo que he tenido en los últimos días, tengo una deuda en este blog con la muerte, esta misma semana, del cura Rafael Sánchez (1920-2006), cuyo trabajo documental fue el iniciador y el inspirador para el cuidado y sólido documental chileno. Si bien Sánchez estaba gravemente enfermo desde hace dos años, saber de su muerte fue impactante (aún tres días después de ocurrida). Me quedé con la sensación de ser testigo cómo otro artista chileno se va con el aire, otro más que se va sin el reconocimiento necesario. El blog de la Asociación de Documentalistas de Chile recoge mucho de su biografía y filmografía. Lo bueno es que con Sánchez sus películas hablan por sí mismas. Ojalá el Archivo de la Universidad Católica, que guarda sus trabajos, apure el paso con la restauración de sus películas, que solo seguirán vivas si pueden ser vistas.
Y ahora esto. Comparto el desconcierto de Jero Rodríguez y Cristián Jiménez. «25 watts» desprendía humor y vida desde el hastío; «Whisky» lo hacía desde la pena más profunda, la silenciosa pena de estar perdiendo tu vida. Y que ahora Rebella se haya muerto no es irónico: es intensamente triste.
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ACTUALIZACIÓN – VIE 7 JUL – 10:03 AM ::: Hoy salen pequeñas notas sobre la muerte de Rebella en LUN y EL MERCURIO, y algo mucho mejor en LA TERCERA (que incluye una pequeña columna de Héctor Soto, pero que con el nuevo formato ni idea cómo se linkea). PÁGINA 12 hace lo suyo, pero quizás lo único nuevo es lo que aparece en LA NACIÓN Argentina, que trae un detallado reporte de su corresponsal en Uruguay.
La muerte trascendió poco antes del mediodía y la difusión generó una profunda congoja. Fue justamente Stoll quien lo encontró en la madrugada del jueves cuando Rebella se había quitado la vida, según las informaciones de la policía local. Stoll llegó a la 1, junto con la novia de Rebella, al departamento que éste tenía en el barrio de Pocitos, cerca de la rambla montevideana. En una silla, recostado sobre una mesa en la que había una computadora personal, Rebella yacía muerto con la mano caída y un arma calibre 32 en el piso. Tenía un disparo en la sien derecha. En la mesa había tres vasos, una copa vacía y una botella de whisky por la mitad. La policía puso «muerte sospechosa» en la carátula, aunque, según los investigadores, todo indica que se trató de un suicidio.
Y en CLARIN:
Según comentó el productor a Clarín, él había estado en contacto con Rebella durante los últimos días y el realizador tenía planeado viajar al Festival de Locarno en agosto. El productor comentó también que Rebella y Stoll avanzaban en un nuevo guión, del que ya le habían enviado algunas páginas. «No puedo creerlo, era un tipo tan alegre, éramos muy amigos», dijo.
Lo que me tiene más desconcertado es que hasta este minuto no ha sido nada publicado en EL PAIS de España, y ninguna agencia internacional en inglés ha llevado la noticia (por lo menos, ni Reuters, ni AP, ni AFP, que son las que nutren principalmente a los medios anglosajones, siendo que sus pares en español ya lo han hecho), por lo cual, la noticia sigue ausente incluso de las ediciones web de diarios como el NEW YORK TIMES y THE GUARDIAN UK. Rebella y Stoll eran ampliamente conocidos en la escena fílmica internacional. Y esto me habla de los dependientes que siguen siendo los diarios de las agencias internacionales.
Por último, EL PAIS Uruguay lleva una nota (de acceso solo para registrados) escrita con mucha cercanía (como todo en Uruguay) y que guardo en el archivo de recortes de este blog.
FALLECIO EL JOVEN REALIZADOR JUAN PABLO REBELLA, CODIRECTOR DE LOS EXITOSOS FILMS NACIONALES «25 WATTS» Y «WHISKY»
Adiós a un cineasta excepcional
La tragedia cancela una de las carreras más promisorias del cine uruguayo contemporáneoGUILLERMO ZAPIOLA
La noticia cayó como un mazazo en el medio cultural uruguayo, que no acaba de recuperarse del impacto provocado por la súbita, trágica, inesperada muerte del realizador Juan Pablo Rebella (32 años, suicidio). El cuerpo del joven cineasta fue encontrado sin vida por su novia y por su compañero de toda la vida, Pablo Stoll.
El sentimiento de dolor fue compartido ayer por mucha gente. Bastaba hacer girar el dial de la radio para constatar hasta qué punto la muerte de Rebella estaba pegando a gente que lo conoció. El equipo del programa No toquen nada, de Océano FM, arrancó refiriéndose al tema, tardó unos minutos en confirmar la noticia, y un rato después sus integrantes, casi todos ellos amigos del cineasta fallecido, se declararon incapaces de seguir haciendo su trabajo habitual, pusieron música y luego cerraron con otra referencia a la tragedia. Sus colegas y rivales de Justicia infinita reaccionaron de manera similar.
Esos amigos y mucha otra gente (de hecho, casi toda la gente del cine, la música, la publicidad y el periodismo uruguayos) estuvieron después en el breve velatorio que se realizó entre las 14 y las 16 de la tarde en la empresa Martinelli, y en el posterior entierro en el cementerio del Buceo. SIGUE…