Aprovechando la pausa y las fiestas patrias, y como una manera de sacarle nostalgia a todos esos amigos lectores que están afuera, y a los que están acá y no se acordaban de que existía, les dejo este clásico de finales de los ochentas: la versión completa de «El cartero chifla dos veces», con el rey de la comedia Jorge Franco. Yo sabía que la estaban vendiendo en el Persa Bio Bío (un DVD tristemente copiado de un VHS carreteado) y alguien la debe haber comprado y se dio la pega de subirla ¡completa! en seis partes. Qué decir: nada más chileno que esto.
Trivia de amigos: mis papás a finales de los noventas tenían un video club en Viña del Mar, y recuerdo que yo acompañé a mi mamá a las oficinas de Video Master Collection, ubicadas en un edificio del centro de Santiago, a comprar películas para el video, y tuvimos en nuestras manos una de las primeras copias recien editadas de esta maravilla. Como ni mi mamá ni yo teníamos idea de lo que el vendedor nos estaba hablando, le hicimos caso y la llevamos a Viña. A las pocas semanas fue necesario pedir más copias. «El cartero chifla dos veces» fue el primer video-humorístico hecho en Chile en esa época (1987). El video incluye una leve caracterización de Pinochet, que en esa época ya era considerado un acto de rupturismo extremo. Y el final, claro, la última línea, es uno de los mejores chistes que he visto en una pantalla, y que es lo que debió haber dicho Boris Quercia al final de «El rey de los huevones».
Aca va, completita:
De esta colección de videos llamada «De buen humor» luego vendrían «Los años dorados de la tía Carlina» (1987, que nunca me pareció tan divertida, pero que también fue un exitazo), y «La mansa fiesta» (1988) y «El manso asado» (1988) y «Cartagena Vice» (1989), todas con Che Copete. De Franco solo se supo que hizo posteriormente «Flor de hotel» (1988) que ya no era tan buena, y que también subieron a YouTube. Luego vendrían subproductos ya derechamente de comedia-lumpen, pero igualmente exitosos, como «Cementerio pa’l pito», y «Volver al Paseo Ahumada», con Dinamita Show y Los Atletas de la risa, cada una con casi 10 secuelas.
Pero Franco fue claramente el más oportuno y sagaz de todos estos comediantes. De hecho, su humor es el más blanco, y el más tonto, y si uno le tiene cariño, es por momentos casi surrealista. Por supuesto, su personaje es chucheta y bonachón, y luego de estos dos exitosos videos, entró a la caprichosa televisión, que lo endiosó con su personaje de El Náufrago, y luego lo dejó botado, y creo haberlo visto llorando penas en algún programillo de farándula cuando estuvo enfermo.
Que tengan un lindo y descansado 18. Este blog no será renovado hasta el próximo miércoles 20 de septiembre.